Un tratamiento contra los piojos realizado por especialistas es la mejor manera de eliminar problemas de pediculosis de la cabeza de nuestros hijos. Estos procedimientos buscan la máxima eficacia. Pero también hay que tener presente que los padres y afectados tienen que poner de su parte para alcanzar el éxito.
Desde Adiós Piojos, como especialistas en este campo, nos gustaría aprovechar estas líneas de nuestro blog para darte una pequeña lista de consejos para que el éxito de estos procedimientos esté totalmente asegurado. ¿Preparados? ¡Comenzamos!
En artículos anteriores en este mismo espacio, ya hemos respondido algunas preguntas sobre la pediculosis, como por ejemplo “Las 7 dudas más frecuentes sobre piojos”. Pero ahora, nos gustaría acercarte unas recomendaciones para asegurarte que el tratamiento contra los piojos sea cien por cien efectivo.
1- Sigue siempre las recomendaciones del profesional. Es la única manera de evitar complicaciones, sustos y malos resultados.
2- Utiliza la lendrera todos los días mientras dure el tratamiento. Se trata de una herramienta fundamental para eliminar por completo los piojos y las liendres. Su uso resulta básico. Así que no te olvides, la lendrera es tu aliada.
3- Evita la utilización de productos cuya eficacia no está probada, ni tampoco aquellos que prometen soluciones mágicas. Sigue las recomendaciones de tu especialista y la pediculosis desaparecerá por completo, pero no quieras poner las soluciones por ti mismo, ya que podrías empeorar la situación.
4- Durante el tratamiento, cuidado con compartir objetos personales. Durante estos procedimientos, Presta atención a los gorros, sombreros, gorras, peines, diademas y elementos de aseo.
5- En el caso que tu hijo o hija tengo el pelo largo, es muy conveniente apostar por peinados recogidos para evitar contagios innecesarios.
6- Vigila también otros elementos del hogar, como toallas o sábanas. Lo mejor será lavarlas en agua caliente para evitar problemas. Además, guarda los peluches y cojines en bolsas herméticamente cerradas durante tres días. De esta manera, te asegurarás que los piojos o liendres que pudiera haber, desaparezcan y no supongan un riesgo de contagio.
7- Ante cualquier duda, ponte en manos de un especialista y déjate aconsejar por ellos.
Con estas pequeñas premisas, te aseguramos que cualquier tratamiento contra los piojos tendrá un final feliz, que no es otro que la erradicación de este problema de la cabeza de nuestros pequeños. ¿No te parece demasiado sencillo?