Seguramente, a estas alturas ya estarás al tanto de lo peligrosos que pueden ser los piojos y, sobre todo, la importancia de la prevención para evitar el contagio de piojos. En este mismo blog también os comentamos en su momento cómo evitar que este inconveniente se extienda en el hogar o en el colegio. Pero, ¿qué ocurre a la hora de cortar el pelo? ¿Es peligroso ir a la peluquería con piojos?
¿Es posible que no nos atiendan en caso de que nuestro pequeño tenga algún tipo de problema con piojos o con liendres? Lo cierto es que, al igual que en el hogar o en la escuela, la peluquería es un lugar que podríamos denominar “peligroso”, ya que se trabaja con cortes de pelo y utensilios que se usan en distintos clientes. Es muy importante, por tanto, saber actuar en esta situación.
Lo primero de todo: Siempre que vayamos a una peluquería, deberemos avisar a los profesionales antes de comenzar el corte de pelo. De esta manera, será posible evitar la infestación.
Como ya sabrás por anteriores artículos de este blog, los piojos no vuelan, aunque sí se mueven muy rápidamente, por lo que pueden pasar de la cabeza al peine y, desde allí, a la cabeza de otro cliente.
Eso sí, hay que tener muy claro que, por el mero hecho de estar en la peluquería, una persona no se verá contagiada de piojos. Estos insectos no vuelan.
Para poder evitar cualquier susto o problema, será conveniente que desde la peluquería se preste especial atención a todos los cepillos, tijeras, toallas, batas o incluso a los sofás o sillas en los que se hubiera sentado el cliente.
Con un poco de cuidado y siguiendo unas pautas de higiene, se conseguirá evitar cualquier riesgo de contagio, evitando también cualquier alarma injustificada, tanto en los profesionales como en la clientela.
A nadie le gusta los piojos. En Adiós Piojos, menos. Por eso te ayudamos en todo lo que necesites, guiándote, asesorándote y resolviendo cualquier duda que pudieras tener. Ofrecerte el mejor servicio y atención es uno de nuestros objetivos más importantes.
